24M nocturno: entre el mapping y la ‘Memoria del despojo’
Esta edición de la marcha del 24 de marzo en Tandil, ‘Día de la Memoria, por la Verdad y la Justicia’, tuvo su punto de concentración en la Facultad de Arte de la Unicen. En el hall de esa casa de estudios, se inauguró la muestra ‘Memoria del despojo’, de Manuel Massolo, mientras se proyectaba un mapping, a cargo de Guillermo Dillon.
Tal como estaba previsto en el cronograma de la Semana de la Memoria, a las 20 del sábado 24 se inauguró la muestra ‘Memoria del despojo’, del artista Manuel Massolo, en el hall de la Facultad de Arte. Esta muestra reúne obras realizadas por Manuel en los últimos diez años. Tres series cuyo hilo conductor se encuentra en la búsqueda permanente por construir memoria sobre los despojos de la dictadura; y, en particular, sobre María Eugenia Sanllorenti, mamá de Manuel, a quien dio a luz apenas quince días antes de ser secuestrada y desaparecida durante la última dictadura cívico-militar. En 2009, el Equipo Argentino de Antropología Forense identificó los restos de Maru.
En el acto de inauguración de la muestra, Rubén Maidana, secretario de Extensión de la Facultad de Arte, remarcó el hecho de que este año se logró un calendario común de las actividades por la Semana de la Memoria, como símbolo de, en los tiempos que corren, “un interés de trabajo en conjunto”.
Desde lo personal y retóricamente, Maidana se preguntó “cómo se hace para poder sostener la lucha durante tanto tiempo”, lo que lo llevó a la reflexión de que “no en vano hay un predominio de mujeres llevando adelante eso. Me parece que la mujer siempre tiene esa cosa más conectada con la tierra, con lo maternal: es la única que puede tener una verdadera fuente y raíces fuertes para poder sostener esto”. En ese punto, hizo una consideración hacia el concepto de fe “como convencimiento, creer en algo, sustento de convicciones”, a la que sumó: “la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve, y me parece que es lo que sostiene que, 42 años después, siga estando la misma energía puesta en que no se olvide”.
Maidana aludió a cómo la memoria se mantiene y se transmite a los jóvenes, y al “poder el arte, que es lo que nos convoca. Está muy en boga la palabra ‘transmutar’ y la posibilidad que nos da el arte es esa: transmutar el dolor en otra cosa”. Trajo a colación palabras que en algún momento le compartió un amigo, que decía: “Perdonar no es olvidar: es recordar sin dolor”. De esta manera, dio pie a que eso fue lo hecho por Manuel en la muestra, y cerró: “Me da alegría que haya muchos jóvenes. Esa es la posta.”
Algunos de los asistentes a la inauguración de la muestra de Manuel Massolo.
“Lo que significa poder mostrar estos cuadros, en esta ciudad”
Seguidamente, fue el propio Manuel Massolo el encargado de brindar algunas palabras. De entrada, se excusó: “Lo mío va a ser breve”. Agradeció a los allí presentes por estar, y a la Universidad “por abrir este espacio y convocarme. En el momento en que me convocaron, ni lo dudé por lo que significaba poder mostrar estos cuadros, en esta ciudad”. Esta frase, tan simple para muchos, desató varias lágrimas de emoción en Manuel: “No voy a poder hablar mucho, porque… está complicado”. Tandil que no es una ciudad más en el mapa biográfico de Manuel: es la ciudad natal de su mamá, de los amigos de Maru, y de una abuela admirable por donde se la mire, como lo es Eva Fanjul de Sanllorenti, que no ha dejado de luchar siquiera un día por la memoria de su hija y la de los treinta mil detenidos-desaparecidos, como integrante fundadora del grupo Memoria por la Vida en Democracia. Con sus casi 93, marchó en la vigilia del último 23 de marzo.
Manuel Massolo.
“No voy a decir nada de los cuadros porque me parece que los cuadros completan la mirada de las personas que los miran y lo pueden analizar”, expresó Manuel, y confió: “Yo mismo, cada vez que veo un cuadro, le doy una interpretación diferente. Cuando tengo que ponerle un título a un cuadro, y pasaron cinco años desde que lo pinté, le pongo otro. Todo el tiempo, uno está resignificando en relación a lo que va atravesando en la vida, con respecto a este tema y a la vida en general”.
“En este tema, todo el tiempo estamos descubriendo cosas, reconstruyendo el camino. Para las personas que conocieron a mi mamá, tienen el recuerdo y la vivencia de haber compartido con ella… Pero en mi caso, lo voy construyendo a través del relato de todos ustedes”. Con esa frase, en medio de un nuevo llanto que se acompañó del aplauso de todos (un aplauso sostenido, en silencio, como lluvia de abrazos calurosos), Manuel dio por inaugurada su muestra.
Manuel Massolo junto a integrantes del grupo Memoria por la Vida en Democracia. Entre ellas, su abuela Eva.
Las obras de la primera serie son de tiempos previos a 2011, año en que fueron restituidos los restos de Maru Sanllorenti, marcadas por la incertidumbre de no saber en dónde estuvo Maru en cautiverio. Las de la segunda etapa, son posteriores a la restitución y la sepultura dada a fines de octubre de 2011, en el cementerio municipal de Tandil. La tercera serie se compone de obras en que se propone una mirada sobre los diarios de los días de la última dictadura. La muestra “Memoria del Despojo” se encuentra en exposición hasta el 13 de abril, en la Facultad de Arte (9 de Julio 430).
Apuntes de la marcha
Minutos después de las 21, la columna, encabezada por el grupo Memoria por la Vida en Democracia y su bandera (con las y los desaparecidos de Tandil), partió del frente de la Facultad de Arte hacia Pinto.
Ya en esa arteria, doblaron en Alem para hacer la primera parada del recorrido: la Escuela Técnica Nº 2. Allí se hicieron unas breves proyecciones, en el marco del mapping, y se recordaron los nombres de quienes fueron estudiantes de esa institución, que allí poseen sus respectivas Baldosas de la Memoria: Ricardo Cuesta, Omar Marocchi, Santiago Vergara y Ricardo Del Río.
Luego, la manifestación continuó por calle Maipú para dirigirse hacia el Colegio San José. Un momento por demás emotivo sucedió antes de llegar al colegio: al pasar por el frente del edificio en el que vive Eva Sanllorenti (mamá de Maru y abuela de Manuel), todos los manifestantes cantaron su nombre. Ya se encontraba en su hogar y salió a saludar por la ventana a las filas de jóvenes (y no tanto) que la homenajeaban, con el cariño que Eva infunde.
Llegados al Colegio San José, Petra Marzocca fue la encargada de nombrar a los vecinos desaparecidos de Tandil que fueron estudiantes de esa institución; entre ellos, sus dos hermanos, Mario (33) y Ángel (Lito, 33), como así también Edgardo Fuentes Corral, Carlos Luciano Canziani, Daniel Ricardo Lapera, Jorge Luis Mereb y Oscar Luis Lauge.
Finalmente, el mapping y el recorrido por las Baldosas de la Memoria culminó en el veredón de la Escuela Nº 1, en donde Adeli Peña y María Rosa Toncovich mencionaron a sus hermanos Juan Roger Peña (que allí ejerció la docencia) y María Graciela Toncovich (que fue estudiante de la casa), respectivamente. Junto al mural de Manuel Belgrano y Domingo Faustino Sarmiento, el acto finalizó con la proyección de las imágenes de las y los desaparecidos de un Tandil que supo ser ‘la serrana (no tan) gentil’.
