A la violencia de arriba, propuestas y organización desde abajo
Los tarifazos que se materializan en las boletas de los servicios públicos de agua, gas y electricidad siguen siendo tema de preocupación en la región centro de la provincia de Buenos Aires. En Tandil, este sábado 12 se realizó una segunda marcha, multitudinaria, contra el aumento desmedido y arbitrario de las tarifas. El lema: “No al Tarifazo. Agua, electricidad y gas son nuestros derechos”. En Azul, se realizó una asamblea pública y popular, con participación de vecinos, comerciantes, comisiones vecinales, concejales y sindicatos.
Con el mismo horario y punto de encuentro que la del viernes 4, en Pinto y Chacabuco se concentraron más de quinientas personas para volver a marchar y resaltar que en Tandil no son pocos quienes sufren las consecuencias de los tarifazos. La convocatoria estuvo a cargo de la multisectorial ‘Tandil contra los Tarifazos’, de reciente formación, con el objetivo de visibilizar este estado de situación. Uno de los puntos principales del reclamo reside en declarar la Emergencia Tarifaria en todo el territorio tandilero, lo que implicaría retrotraer las tarifas a los valores de diciembre de 2017 y congelarlas por dos años.
Que hay personas que se ven en la difícil y dura decisión de los medicamentos y alimentos o el pago de la luz o el gas, es una realidad, en un Tandil que se aleja de aquella “ciudad populosa y rica” que soñó el brigadier fundador. Una ciudad que hace rato no es una isla, ajena al contexto nacional. Comerciantes como uno de los que se acercaron a la marcha, cargando, en una mano, con una boleta de electricidad que ronda los 7.500$, y con la otra casi bajando la cortina metálica, al borde del cierre, ya no son casos aislados.
El céntrico adoquinado de Tandil fue tomado y transitado por más de quinientos vecinos y vecinas de la aldea, con punto de culminación en el veredón de la municipalidad y con la lectura del documento elaborado para la ocasión. Con el repiqueteo de los bombos y el colorido de Flor de Murga, a pesar de la pálida generalizada, los cánticos fueron especialmente dedicados al tandilense por casualidad Mauricio Macri, a María Eugenia Vidal y al propio intendente Miguel Lunghi, y a sus respectivos árboles genealógicos.
Foto: Liliana Torres (para Miradas del Centro.com.ar)
Entre quienes participaron de la movilización, además de los propios vecinos autoconvocados, se encontraban: concejales de Unidad Ciudadana; integrantes del Partido Justicialista de Tandil; la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP); la Asociación Bancaria; Patria Grande; SUTEBA; la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE); la Central de Trabajadores Argentinos (CTA); el MPE; diversos Centros de Estudiantes de secundarias y facultades; docentes y no docentes de la UNICEN; SMATA; La Cámpora; comerciantes, así como representantes de PyMes de la (aún) Ciudad de las Sierras, entre muchos más.
Foto: Liliana Torres (para Miradas del Centro.com.ar)
Documento elaborado desde ‘Tandil contra los Tarifazos’
El comunicado leído en las escalinatas de Belgrano al 400 señala: “Nos encontramos aquí reunidos todos los sectores agredidos por los tarifazos en los servicios públicos que desde hace dos años sufrimos los argentinos.
“Es necesario que el gobierno Nacional, Provincial y Municipal escuchen el grito de ‘Basta de Tarifazos’ que expresa la ciudadanía, para poner un freno a la brutal transferencia de ingresos que significan dichos aumentos. Desde que asumió Macri, el gas aumentó más del 1.300% y la luz más de 1.500%, bajo la excusa de realizar una ‘readecuación tarifaria’. Podemos observar algo que el Gobierno trató de desmentir: los fuertes tarifazos fueron una transferencia fenomenal de recursos desde el bolsillo de los trabajadores, comerciantes y empresarios, hacia las arcas de las empresas privadas de servicios. Con la excusa de que era necesario actualizar las tarifas para así poder contar con fondos suficientes para invertir y mejorar el servicio, miles de familias hoy hacen malabares para poder pagar la boleta de luz o de gas.
“Claramente, el impacto de las subas de las tarifas no es igual en lo que respecta a los distintos sectores sociales. Los sectores menos pudientes no sólo se ven perjudicados porque gastan una elevada parte del salario en las tarifas, alimentos y alquileres: además, y teniendo en cuenta el caso del gas natural y en garrafa, son los que habitualmente hacen frente a servicios más caros. Aquellos que no tienen la posibilidad de acceder a una red de gas natural se ven obligados a comprar garrafas, que han experimentado una suba de precio descomunal en los últimos meses.
“Un informe de la Universidad Nacional de Avellaneda muestra que en el año 2015, el peso promedio de una canasta de servicios públicos rondaba el 6% del salario mínimo, mientras que en el 2018 este porcentaje subió al 21%. Así, la Argentina pasó de estar última en 2015 al 3er puesto en 2018, detrás de Venezuela (33%) y Chile (23%).
“En el 2015, el promedio mundial de subsidios a la energía eléctrica por habitante era, según el FMI, de 640 dólares: mientras que en la Argentina era de 413 dólares, en los Estados Unidos destinaron 2177 dólares, China lo hizo en 1652 y España en 521.
“Con el argumento de la baja del déficit fiscal, que ascendió del 2,3 % en 2015 a 3,2 % proyectado para 2018 (antes de los descalabros financieros provocados por la devaluación del peso y el creciente peso de la deuda externa), se carga sobre la ciudadanía el costo de haber quitado impuestos a los sectores concentrados de la economía.
“En los últimos dos años y medio, subió la proporción de los impuestos regresivos, como el IVA, los impuestos a los Créditos y Débitos Bancarios, a los Combustibles, Internos, etc. que son cobrados sin distinguir el poder adquisitivo del contribuyente. Este grupo aportaba en promedio el 55,24% de la recaudación hasta 2015, mientras que su participación creció al 61,54% en la actualidad. En cambio, los impuestos progresivos, que se abonan en función de la mayor renta o patrimonio, bajaron del 44,76% al 39,46% en el mismo período. La creciente inflación, junto con los tarifazos y las paritarias por debajo de ellos, trae aparejados grandes problemas: a la economía doméstica de los trabajadores, a la subsistencia de los comerciantes y a distintos sectores producción, conformándose un círculo vicioso, con un marcado descenso del consumo que genera pérdida de puestos de trabajo, alza de precios y cierre de comercios.
“Desde que Mauricio Macri asumió la Presidencia, la inflación acumuló un 100% de aumento, mientras que los salarios lo hicieron en un promedio del 60%. De esta manera, a mediados del 2018, y al cumplirse dos años y medio de gobierno macrista, el poder adquisitivo del salario ha caído 8% en el mejor de los casos y 14% en el peor.
“La administración de Macri y Vidal vienen llevando su slogan ‘Cambiemos’ también al bolsillo de los argentinos. En el comercio y la industria, la fuerte caída de los niveles de consumo, sumado a un alza de los costos y a las dificultades para sostener niveles de actividad, hacen que estos sectores sufran un sideral incremento de costos que se traslada a precios o se reducen gastos, que, en la mayoría de los casos, importan reducción de jornadas laborales, suspensiones o despidos de trabajadores.
“Un modelo basado en la especulación financiera, la apertura indiscriminada de la economía, la fuga de capitales, la dolarización de los servicios públicos y los combustibles, y la exportación de materias primas sin valor agregado y con cada vez menos regulación (quita de retenciones, no rendición de divisas) generan un país con exclusión para la mitad de sus habitantes.
“Seguiremos haciendo oír nuestras voces para que se retrotraigan las tarifas de servicios públicos.
Foto: Liliana Torres (para Miradas del Centro.com.ar)
“La Usina Popular y Municipal de Tandil no puede estar ajena a todo lo que nos está pasando. Es necesario que adopte medidas para morigerar el impacto en comercios e industrias, y garantizar el acceso domiciliario al sistema eléctrico de todos los tandilenses.
Por todo esto, solicitamos al Concejo Deliberante de Tandil la declaración de la Emergencia Tarifaria para el partido de Tandil. Asimismo, que solicite al Ejecutivo Nacional y Provincial: que retrotraiga las tarifas de luz, gas y agua a los valores vigentes a Noviembre de 2017; que se amplíe la Tarifa Social para los que tengan ingresos menores a tres salarios mínimos, vitales y móviles; que se incluya en la Tarifa Social a Clubes de Barrio, Centros Asistenciales públicos, Comedores Comunitarios, Centros Culturales, Bibliotecas Populares y ONG’s; que los aumentos en Gas Envasado tampoco superen el porcentaje de aumento salarial; creación de un comité de crisis tarifario en el ámbito del poder legislativo y ejecutivo; que el Estado municipal garantice el acceso y permanencia a los servicios públicos, arbitrando todos los medios a su alcance para garantizarlo.
También se pide se retrotraigan las ordenanzas 2505, 5791 y 9495, a los valores vigentes a Noviembre de 2017, y que sean actualizados mediante el coeficiente de variación salarial para los usuarios residenciales; y en el caso de las Pymes y pequeños y medianos comercios, en base al índice de precios mayoristas del Indec. Asimismo, que los ingresos percibidos mediante las actualizaciones en las nombradas ordenanzas, que no figuren en los Presupuestos vigentes del Municipio de Tandil, sean destinados a garantizar el acceso a los servicios públicos para usuarios residenciales y comerciales que el Comité de Crisis determine”, finaliza el documento.
Foto: Liliana Torres (para Miradas del Centro.com.ar)
Entre las propuestas barajadas en la Multisectorial, hubo quienes plantearon el no pago de las boletas. El militante Rodi Cachela indicó al respecto: “Es una respuesta muy fuerte y es la que pueden llegar a oír tanto los gobiernos como las empresas, porque estas cosas, como la marcha, no las escuchan. No van a poder salir a cortar cinco mil medidores”, en un encuadre regido por la desobediencia civil.
En la oportunidad, Darío Méndez, concejal de Unidad Ciudadana, informó que, hace unos días, Rogelio Pagano, amigo de Macri y dueño del monopolio de la distribución eléctrica en la provincia de Buenos Aires, “ganó la friolera de un millón de pesos por hora. Entonces ¿de qué esfuerzo compartido nos hablan? Ahora planean congelar jubilaciones y seguir devaluando fuertemente la moneda que es el requerimiento del FMI. Podrán seguir insistiendo con el verso de la pesada herencia, pero nuestro gobierno les entregó un país desendeudado, con menos déficit fiscal y comercial, con los mejores salarios de América Latina medidos en dólares, con movilidad jubilatoria para nuestros abuelos, con computadoras para los pibes y, sobre todo, con tarifas pagables para el conjunto del pueblo”, recordó.
Por su parte, Hugo González, secretario general de SUTEBA Tandil, destacó el hecho de que, en una sociedad como la tandilense, la gente “salga a la calle a decirle basta a una serie de tarifazos que son francamente insostenibles. Esmerilan el poder adquisitivo del salario de los trabajadores, mientras nos quieren hacer creer que el problema es el derroche de aquellos que quieren darse una ducha de agua caliente o calefaccionar su casa. Es necesario garantizar el acceso a los servicios públicos”, remarcó.
De la Asamblea al despacho ejecutivo: el intendente tiene quien le escriba
El jueves por la noche, la sede del Sindicato de la Carne fue el escenario de la realización de una Asamblea Publica Popular sobre el aumento de tarifas y la forma de aplicación de la tasa por alumbrado público. Allí estuvieron presentes vecinas y vecinos, comerciantes, pymes, emprendedores, jubilados, concejales, Comisiones Vecinales, el presidente de la Asociación de Almaceneros, el representante en Azul de la Defensoría del Pueblo, y algunos gremios.
Foto: gentileza Juan Carlos Mingarro.
Tal como narra Juan Carlos Mingarro, uno de quienes cursó la invitación, “se sintió en cada alocución, la gran necesidad de expresar las distintas problemáticas domésticas y comerciales, ocasionadas por los aumentos tarifarios que hoy enfrentamos”, producto de las actuales políticas neo-liberales. En ese sentido, dieron cuenta de las imposibilidades para afrontar estas facturaciones, “a sabiendas que aún quedan incrementos sustanciales por venir”. Por esto, surgió la propuesta de enviar notas al intendente y al presidente del Concejo Deliberante, a la espera de que representantes de esta Asamblea puedan reunirse para realizarles planteamientos formales.
En la nota que se envió al despacho del cuestionado intendente azuleño, Hernán Bertellys, los integrantes de la asamblea le comunicaron la realización de esta instancia de intercambio y debate. A esta notificación, le sumaron una “breve reseña de los temas abordados”, en donde detallan que, “en primer lugar, tomó la palabra el vecino Juan Carlos Mingarro, quien viene siendo el vocero popular en este tema, que hizo una pequeña síntesis de la situación que estamos atravesando. No tardaron en alzar su voz y contar su realidad los comerciantes, que son los principales perjudicados”. De esas exposiciones, “surgieron diferentes problemáticas: una de ellas es el alumbrado público y el método de su aplicación”.
Foto: gentileza Juan Carlos Mingarro.
En este sentido, “una comerciante que brinda trabajo a siete empleados en sus tres comercios linderos paga de alumbrado público, aproximadamente, cinco mil pesos por el mismo foco”. Por otra parte, “un vecino manifestó su preocupación al haberse acercado a Gas Camuzzi con la inquietud de conocer los valores de consumo, comparando julio de 2017, con un gasto de $2600 este año, mismo periodo y mismo consumo abonaría $7600. Este incremento representa un 150%, cuando su sueldo aún no ha alcanzado los quince puntos de aumento”.
A esto, suman “la preocupación por los posibles aumentos en el servicio de agua potable, que se espera que llegue en la próxima factura”. Ante la urgencia de lo expresado, desde esta asamblea solicitan una reunión, tanto al jefe comunal como al presidente del cuerpo legislativo local. Y así quedaron, a la espera de una “pronta y favorable respuesta”.
