Las generales y el 5to mandato, la unión y la consolidación
En Tandil, con el 95,65% de las mesas computadas (datos aún del recuento provisional), el electorado serrano le dio la victoria al intendente Miguel Ángel Lunghi (Juntos por el Cambio), que lleva 16 años en el poder, con una diferencia de más de 12.500 votos con el candidato del Frente de Todos, el concejal Rogelio Iparraguirre. De las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias, habían resultado superadores de la instancia los espacios de Consenso Federal (con la candidata a intendenta Andrea Almenta), que resultó con el 4,41%; y el Frente de Izquierda Unidad (con Roberto Caracoche encabezando la lista local), con el 1,44%. Se registraron varios casos de personas que, al momento de votar, se desayunaron con que alguien ya lo había hecho por ellas; y la concurrencia de muchos y muchas mayores, acompañadas por sus familiares, que no habían sufragado en agosto.
ALMENTA: “ÉSTE FUE EL PRIMER PASO. LA FUERZA SE ESTÁ CONSOLIDANDO”
Con apenas un hilo de voz, en el local de 9 de julio 243, la candidata a intendenta Andrea Almenta y su equipo de campaña de Consenso Federal Tandil recibió a la prensa, mientras también llegaban las y los demás fiscales de la fuerza. Con poco más de 3.550 votos, Almenta e integrantes de su lista de concejales adujeron que ese número, similar al de las PASO, se debió a la “gran polarización” en todos los niveles del gobierno; y reconoció que esperaban guarimos más elevados, como para que ingresara un concejal de su fuerza al Deliberante, para así ver plasmado el esfuerzo, el ‘todo a pulmón’ a pesar de su pequeña estructura en una banca.
En la jornada intensa del domingo, Almenta, como también lo reflejó Iparraguirre, se encontraba “devastada”, como definió, por la tragedia automovilística que enlutó a buena parte de Tandil, en la que fallecieron los vecinos Pablo Gatti y el pediatra Guillermo Guanella, en Corrientes. Era el pediatra de su hija de 17 años, hasta estos días. Almenta confió que Guanella iba a trabajar en su espacio político y subrayó que se trataba de “personas muy queridas, que han pasado por la vida de mucha gente”.
Sobre la jornada eleccionaria y la campaña, Almenta señaló que las vivieron con alegría: “Hace menos de seis meses que empezamos a conformar este espacio y que nos haya seguido apoyando la misma cantidad de gente de las PASO en estas generales es un regalo, porque no teníamos gran nivel de conocimiento entre las y los vecinos, ni gran estructura”. Desde Consenso Federal Tandil remarcaron que iniciaron su campaña “pensando en el Tandil del mediano y largo plazo”, por lo que seguirán construyendo, “de cara a 2021 y 2023, este proyecto que se enfoca en la producción, el trabajo y la educación, fundamentales para sacar esta ciudad adelante. Este fue el primer paso que dimos. La fuerza se está consolidando”.
En diálogo con FM 95.1 Nativa Tandil, Almenta se centró en el aspecto personal de la campaña, y afirmó haber encontrado “lo que vine a hacer al mundo: hacer política como herramienta transformadora, para encontrarse con otros, escuchar sus necesidades, pensar cómo solucionar sus problemas y que influya en el resto”. También hizo referencia a que encontró eso que enciende un brillo en los ojos, que ella notaba en quienes aman lo que hacen: “Ese brillo lo encontré reflejado en las fotos de la campaña. Es lo que me hace feliz y voy a seguir en esto”. Desde Consenso Federal Tandil celebraron la consolidación del espacio, junto a “la calidad humana y las ganas de trabajar por la sociedad de quienes se sumaron y nos motiva a seguir trabajando para hacer más grande nuestra fuerza”, destacó Almenta.
Miradas del Centro indagó en función de la experiencia de Almenta como candidata a intendenta, en un ámbito como el político, que intenta deconstruirse pero que, en lo municipal, suele empantanarse en el intento. Almenta señaló que vivió su candidatura “como un desafío, un empezar para las demás, para romper el techo de cristal que tenemos en lo local”. En ese sentido, siendo que desde hace un tiempo se destina el 2º puesto a concejal como lugar para las mujeres en las listas, Almenta remarcó que su candidatura sirvió para “demostrar que podemos encarar el Ejecutivo e ir en el puesto 1, no privativo ni exclusivo del hombre. Era un desafío que nos lo debíamos, más en esta era, el de dar el paso y ser validada por parte de la ciudadanía”.
A propósito de ese ‘techo de cristal’ que impide que haya mujeres candidatas a intendenta de Tandil, sobre todo en los partidos principales, Almenta evaluó que se puede deber a que esas fuerzas tradicionales “son de estructura patriarcal, con un ejercicio del poder verticalista y una mirada conservadora respecto al rol de la mujer, sin perspectiva de género”, en donde los espacios en las listas “no se eligen por votación ni consensos sino por decisión de pocos”. Toma de decisiones en esos partidos que “pasa por los hombres y a las mujeres se les asignan roles específicos y estancos: secretaría de la mujer, lo social, lo cultural, educación”, entre otros. “Con mirar las fotos en las campañas basta para saber quiénes participan en la toma de decisiones”, como también para dar cuenta del rol secundario de la mujer. Almenta insistió: “El progresismo, en algunos espacios, sólo es una proclama de voluntades: buscan destacar a una mujer para mostrarse abiertas en relación al género, pero al hurgar, las relaciones de poder son verticalistas y falogocentristas”.
Quien hasta el domingo 27 de octubre fue la candidata a la intendencia de Tandil por Consenso Federal reconoció lo difícil de deconstruir “modelos tan anquilosados”, para lo que se requiere de “un recambio generacional en la conducción de esos partidos, por edad y por una estructura mental con nuevos modelos”. Por lo pronto, como paso significativo, el equipo de campaña de Consenso Federal Tandil se integró de un alto porcentaje de mujeres, “porque no es sólo la mujer como candidata, sino atravesarlo con perspectiva de género”. Mujeres en roles fundamentales como los de jefas de campaña (Alejandra Malisia), de prensa (Belén Cotine), y de equipos técnicos (María Laura Shemy), hicieron a un cambio en la estrategia de campaña. “Hicimos una diferencia y nos sentimos con mucho orgullo de haber encarado esta muestra de que se puede armar una lista con esta mirada”, concluyó Almenta.
IPARRAGUIRRE. “HAY QUE COMPRENDER LA MAGNITUD DE LA ELECCIÓN QUE HICIMOS”
Pasadas las 20, la cuadra de Paz al 900 se colmó hasta tener que cortar el tránsito. El punto de encuentro se mudó del local del Partido Justicialista al del Frente de Todos, previendo la afluencia de gente, y se quedaron cortos en la expectativa. Como el caso de Almenta, Rogelio Iparraguirre subió al escenario del local de Paz 965, y mientras cientas y cientos coreaban su nombre, antes del balance de los más de 120 días de campaña, aclaró que necesitaba pedirles que “compartan con mi familia y con muchísimos tandilenses que, en medio de una elección, tuvimos que sentir también mucho dolor”, notoriamente quebrado. “Un amigo muy cercano, de toda la vida, de toda mi familia, cuyo hermano es como un hermano mío, con otro vecino, perdió la vida volviendo de pescar en Corrientes”, indicó el candidato del Frente de Todos, y agregó: “A toda la familia Guanella les mandamos mucha fuerza, una familia que Tandil adora y los vamos a estar acompañando”, embargado por el llanto, los aplausos y seguido de un largo y sentido silencio.
Luego de ese particular inicio, volvió al plano político, y en referencia a la elección a nivel nacional, Iparraguirre destacó: “Una vez más, el pueblo argentino vuelve a mirarse a sí mismo, a su familia, a su cuadra, a su barrio, a su compañero de laburo, y sabe decir que no cuando hay que decir que no, y sí, como le dijo a Alberto Fernández y a Cristina Fernández de Kirchner, en la Nación, con un triunfo contundente”. En ese sentido, subrayó: “Nunca más jugar en función de los intereses de una minoría, con el hambre y el bolsillo de millones de argentinos. Aprendimos que el neoliberalismo no puede volver nunca más”. Asimismo, definió que esta elección “nos devuelve la esperanza, la autoestima a los argentinos, para volver a creer en nosotros mismos y reconstruir la patria, la nación”.
Respecto a la elección bonaerense, “no hay invento posible de los medios de comunicación, de las redes y los trolls, que pesen más que la necesidad de la gente de vivir dignamente, con un trabajo producto de su esfuerzo y sacrificio”, razón principal que, según Iparraguirre, fue la que permitió que Axel Kicillof sea el nuevo mandatario de la provincia de Buenos Aires. El candidato a intendente envió sus felicitaciones y un cálido abrazo a Kicillof y Magario, “desde Tandil, que también hizo que Axel sea gobernador de todas y todos nosotros”.
Sobre los resultados en el pago chico, en primer lugar, Iparraguirre envió su felicitación a Miguel Lunghi por su quinto triunfo consecutivo como intendente de Tandil, hasta el 9 de diciembre del 2023. Cuando las y los simpatizantes del Frente de Todos se aprestaban a una abucheada hacia quien encabezó la lista local de Juntos por el Cambio, el propio Iparraguirre les pidió que no lo hicieran, a lo que le respondieron efectivamente (lo que no pasó en el Comité Radical minutos después), y les aconsejó que no cometan el error de subestimar ni enojarse con sus vecinos por cómo votan; y que “la pelota está en nuestra cancha y somos nosotros los que tenemos el desafío de ser mejores, interpretar e interpelar mejor a nuestros vecinos, y trabajar más por ese Tandil que amamos, con una desigualdad reinante”.
Respecto al balance, Iparraguirre resaltó que se trató de una elección de casi 40 puntos para el Frente de Todos en Tandil, producto de lo aprendido en esta oportunidad: “No se trata solamente del peronismo, sino de construir una alternativa electoral que dé un lugar a quienes creen que en Tandil se puede vivir con igualdad de oportunidades para todos, y tiene en el peronismo a su núcleo central”. Según el actual concejal, la de este 27 de octubre ha sido la mejor elección del partido peronista en Tandil desde 1987, por lo que en medio de la ovación felicitó a todas y todos quienes “cumplieron una tarea sin precedentes”. En aras de seguir trabajando, sumándose y organizándose, Iparraguirre insistió que se debe “comprender la magnitud de la elección que acabamos de hacer hoy en Tandil. Estamos haciendo historia”.
A la hora de los agradecimientos, quien fue el candidato a intendente del Frente de Todos Tandil remarcó que la campaña “fue posible porque fuimos muchos y muchas”, por lo que les agradeció, en primer lugar, a todos y todas quienes estaban allí presentes: “Nunca imaginamos que la calle Paz iba a terminar cortada por semejante afluencia de vecinos y vecinas con tantas ganas de celebrar que viene una nueva Argentina, con tantas ganas de seguir trabajando”. Hizo mención al triunfo en la localidad de María Ignacia-Vela y recordó que desde el espacio seguirán a por la elección del delegado por el voto popular, lo que cosechó muchos aplausos. Dedicó un agradecimiento muy especial al desempeño de todos y todas las fiscales del Frente de Todos, así como a la labor de la militancia de organizaciones políticas, sociales, gremiales, que se acercaron para ser parte, ayudar y poner el cuerpo, tales como la Corriente Peronista Descamisados, Nuevo Encuentro, la 17 de noviembre, el Partido Comunista, la Juventud Peronista, las Mujeres Sin Techo, el Socialismo para la Victoria, La Cámpora (“tan maltratados y vapuleados, que con altura se bancaron su identidad construida en base a convicciones, principio, valores”, expresó Iparraguirre), la Mesa Intersindical, La Bancaria, Camioneros, Suteba, Telefónicos, SMATA, UTA, UOCRA, UOM, y “a los trabajadores y las trabajadoras de Tandil, dolorosos testigos de este proceso que corrió del centro de la escena a los laburantes y que tanto daño les hizo con las pérdidas de fuentes de empleo y del poder adquisitivo”.
Otros agradecimientos especiales estuvieron dedicados al Movimiento de Participación Estudiantil (MPE), en el que milita Daiana Esnaola, que ingresó al Concejo Deliberante; a Nicolás Carrillo, por el gran trabajo territorial de campaña, “con quien llegamos a esta coyuntura con determinados matices que no siempre afinan, y bastó el cierre de listas del 22 de junio para que ahí estuviese junto a todas las compañeras y compañeros del Movimiento Evita”; y a las y los militantes de Patria Grande, “porque procesos tan intensos como una elección en la que se pelea por el futuro y la supervivencia de la patria, sirven para conocernos más y mejor” (movimiento al que pertenece Juan Arrizabalaga, tercer concejal electo).
Iparraguirre agradeció a quienes les costó encontrar un común denominador que les aunara, “que nos juntábamos por un lado y otros se desjuntaban”, síntesis de la historia de los últimos tiempos del Partido Justicialista en Tandil. Esta elección “nos encontró capaces de responder a la demanda que hace años nos hacían vecinos y vecinas, de juntarnos, ‘porque hay que construir una alternativa y nunca sus diferencias pueden ser más importantes que las necesidades de laburo, techo, salud, educación, infraestructura y seguridad dignas de nuestra gente’”. En ese punto, el candidato reconoció especialmente a Facundo Llano, Fernando Rossi, Pablo Bossio, Roberto Mouillerón, Daniel López, Raúl Escudero, Mario Bracciale, Roberto Tassara, Nora Chiacchio, Néstor Auza, Corina Alexander, Rubén Sentis, Gino Pizzorno, entre otros, “por la actitud demostrada en esta campaña”.
El edil dio cuenta de la responsabilidad que significó el haber sido depositario de la confianza para ser “quien pudiese lograr la mejor síntesis y consolidar los principios y experiencias de tantos compañeros y compañeras”. Iparraguirre detalló que, como candidato a intendente, “le puse todo lo que tenía para poner, di todo lo que tenía para dar. No bajé los brazos, siempre miré para adelante, acompañado de todos ustedes y de la fuerza que me brindaron. Dejé el cuero, literalmente”, por lo que recibió una ovación, mientras confiaba que “no me gusta hablar en primera persona, pero hoy era una ocasión para decirles lo que siento”.
Agradeció a su amigo Severiano Mon y a quienes integraron el equipo de comunicación (Carolina Gonzalo, Marcos Aguilera, Simón Ventos, entre otros), por el ordenamiento estético, discursivo, práctico del mensaje. Citó a Perón, con aquello de que “la organización vence al tiempo”, variable que, según Iparraguirre, es “la más preciosa de la política, por ser la única que no se puede comprar con nada”. Consideró que hicieron “un uso provechoso del tiempo, convirtiéndolo en experiencia y madurez, y lo seguiremos haciendo”, y pidió un aplauso para Darío Méndez, jefe de la campaña.
Finalmente, su familia más cercana (sus hermanas Martina y Jorgelina, su hermano Aitor, su cuñado y cuñada, su mamá que les cocinó durante estos meses, su suegra que le cuidó a su hija Malvina, y su esposa María), y todas y todos los integrantes de la lista, que “demostraron ser un ejemplo de militancia y vecindad”, fueron receptores del ‘gracias’ de Iparraguirre. Informó que, por los resultados provisionales, el 10 de diciembre debutarán en el Deliberante Juan Manuel Carri, Guadalupe Garriz, Juan Arrizabalaga y Daiana Esnaola, y Florencia Mena en el Consejo Escolar, “trabajando y defendiendo los intereses de todo el pueblo de Tandil, independientemente de su elección en el cuarto oscuro”. Instó a seguir trabajando, mientras sonaba Gilda a todo volumen, con su ‘No me arrepiento de este amor’.
LUNGHI: “LOS TANDILENSES ME DIERON EL PREMIO DE SER ‘EL INTENDENTE DEL BICENTENARIO’”
Hacia las 21.30 del domingo, el intendente Miguel Lunghi cruzó desde su bunker-cábala, en el entrepiso del Hotel Libertador, hacia la casa radical de Mitre al 500. Pidió “un chiquitín de silencio”, para hacer referencia al accidente en Corrientes de Pablo Gatti, “que lo recibí en la sala de parto”, y de Guillermo Guanella, “un afiliado radical que era presidente del Círculo Médico”, y pidió un aplauso para ellos. Seguidamente, le dedicó al pueblo de Tandil un “gracias, gracias y muchas gracias”. Mientras la ‘Juventud Radical’ cantaba, Lunghi intentaba dar cuenta de que el del 27 era un día memorable “porque hemos vuelto a triunfar, y en mi caso particular, para recordar que a los doce años, entré con mi padre por esa misma puerta. Yo jugaba mientras él se reunía con dirigente de la Unión Cívica Radical”. Recordó a los dirigentes radicales “que le han hecho mucho bien a Tandil, a la política y al partido: honestos, humildes y totalmente transparentes”. También homenajeó a sus hermanos, de quienes “mucho de ellos aprendí lo que son los valores”; y agradeció a su familia, “porque hace 16 años que en mi casa soy un fantasma y no estoy nunca”.
Lunghi habló de la emoción que trae “de hace 16 años, porque el pueblo de Tandil, de cualquier barrio, de zona rural, siempre me ha tratado con respeto y con cariño, y no tiene nada que ver con la ideología, porque nunca les pregunté ni me dijeron a quién iban a votar ni de qué partido político, sino que hablábamos de cosas de Tandil”. Se mostró alegre, según él, perdió su apellido: “Con todos los que hablo, me llaman Miguel”, mientras algunos militantes, con la creatividad que los caracteriza, cantaban “Cuatro años más, Miguel Lunghi, cuatro años más”.
También hizo referencia a la gratitud “por todos los tandilenses que me han votado y me han dado el premio de ser ‘el intendente del Bicentenario’”, como por quienes no lo votaron, por el “acto de democracia madura, seria y respetuosa” que se tuvo en Tandil. Se refirió a sus competidores, “tanto Rogelio como Andrea” (aunque se olvidó de Roberto –Caracoche-) para decirles que “todos hicimos una campaña limpia, como corresponde hacerla en un país que quiere cambiar”. En ese punto, diametralmente opuesto a lo sucedido en el acto de Iparraguirre, hubo quienes silbaron al concejal y candidato del Frente de Todos Tandil. Incluso, le cantaron “Otra vez será, Rogelio” y “te querés matar, Iparraguirre, te querés matar”, pero el jefe comunal no sólo no les dijo absolutamente nada, sino que incluso sonrió ante la ocurrencia de ciertos ‘jóvenes’.
Segundos después, y continuando con la costumbre de seleccionar determinadas frases de Raúl Alfonsín, Lunghi señaló: “Todos juntos vamos a trabajar por el consenso y el diálogo, para que Tandil sea una ciudad moderna, digital, creativa e innovadora, cultural, educativa, con su bandera fundamental que es la universidad”. Mientras asentía cierto sector de la propaganda oficialista tandilera, Lunghi agregó: “Para que Tandil siga siendo una ciudad de salud, con el polo sanitario que tenemos, para que no existan tandilenses de primera ni de segunda, y que todos se puedan atender en el Hospital en forma igualitaria y de calidad”.
Respecto a avanzar con lo productivo, Lunghi indicó: “Yo interpreto que tenemos que ir a la parte agroindustrial metalúrgica, porque lo más fuerte que tiene Tandil es el agro”. Lo mismo cabe para la industria tecnológica y anunció la puesta de la piedra fundamental del edificio de Globant; y que también se debe “seguir trabajando fuertemente en lo que es turismo, pilares donde tenemos que avanzar todos los tandilenses”, para, según Lunghi, “romper definitivamente esa palabra que tanto daño nos ha hecho, la ‘grieta’: estando todos juntos, para que la gente viva mejor y con dignidad, porque si los políticos se pelean, sufre la gente”.
El intendente, que lleva 16 años en el sillón de Dufau, y desde el 10 de diciembre sumará cuatro años más, expresó, irónicamente: “No sé si tengo un problema de vista, pero yo la veo bien a Tandil”, para agregar: “Una ciudad que crece, se desarrolla, progresa, que tiene una gran infraestructura, como pocas ciudades del interior de la provincia de Buenos Aires y del Gran Buenos Aires”. También indicó que una gran diferencia la marca la “buena sociedad, solidaria” que tiene Tandil, “con excelentes ONGs, los evangelistas, Cáritas, que trabajan en una forma correcta y que ayudan permanentemente”, ya que “ningún intendente tiene la varita mágica en Tandil: todo lo hacemos entre todos”.
Lunghi se mostró orgulloso de su equipo de gobierno, de los concejales, de los consejeros escolares, “de todos los que han hecho esta campaña, que me han ayudado y cuidado; todos los que doblaron las boletas, las repartieron casa por casa, porque no hay nadie que solo pueda hacer nada. Y el que se la cree, va a terminar mal”. Desde allí, el discurso adoptó una cierta modalidad de stand up para los agradecimientos: el primero, a su jefe de campaña y de gabinete, Julio Elichiribehety, “que hoy cumple su décimo quinto triunfo consecutivo”, insistió con una cifra que a algunos ábacos no les cierra. A Elichiribehety lo definió como “un hombre entero, sano, con todas las palabras, que lucha por los derechos humanos, que viaja con Martha Pelloni por Santiago del Estero, Catamarca o La Rioja y hace sus manifestaciones”. También agradeció al diputado nacional Carlos Fernández, “un chiquito que cuando habla crece, pero cuando no habla no crece. Mucho me ha ayudado, aconsejado, siempre al lado mío, me ha dado fuerzas, y muchas veces me ha retado”.
También le agradeció a “la persona que me muestra un micrófono y yo no se lo acepto: por qué se lo voy a aceptar si es un secreto y los secretos no se pasan por el micrófono”, refiriéndose al edil Juan Pablo Frolik y a los últimos minutos del acto de cierre de campaña en la Cámara Empresaria. En esta ocasión, Frolik le puso una botellita de champagne en el atril, que el intendente agarró y continuó el discurso con ella en mano: “El secreto se los revelo hoy a los que no lo escucharon: era, simplemente, que ganábamos el 27 de octubre en Tandil”. La otra parte del ‘secreto’ sin micrófono, en la que les pedía a sus votantes que apoyaran a la aún gobernadora Vidal y al aún presidente Macri para llegar al ballotage y “no volver al pasado”, entre tanta emoción, seguramente se le olvidó. “El caballero para mí es un hermano y me acompaña desde que lo rescaté de un sótano de calle Alem”, señaló de Frolik.
Del actual concejal Mario Civalleri destacó su “lealtad total” y que, como en el cierre del jueves 24, “se lo había mejorado a la mujer, porque le hice subir el cerro La Movediza con el tema de la réplica más de 200 veces, alrededor de 200 escalones”, y bromeó: “Voy a tener que hacer otra réplica para que vuelva a mejorar su estado físico”. Mencionó a Matías (Civale) sin detallar nada; a Oscar Teruggi, “que tiene siempre cordura, tolerancia y muy buen análisis político”; y a Marcos Nicolini, a quien aplaudieron, “que ha sido un rival circunstancial en una interna correcta y, como corresponde, el que gana va para adelante y el que pierde ayuda, que es lo que ha hecho”. Lunghi felicitó a la electa diputada nacional Melisa Greco, de quien sólo señaló “que tiene más o menos la misma altura que Carlitos (Fernández)”.
Atilio Della Maggiora fue otro de los funcionarios destacados por el intendente en su discurso, como “una persona excelente, que ha llevado la seguridad de Tandil a un muy buen plano, con un trabajo minucioso”. Otro fue Roberto Guadagna, “un gran urbanista y pueden ver cómo está la ciudad, donde le ha dado entrada y salida a las avenidas como Larrea, que después nos ponemos de acuerdo si es para arriba o para abajo, pero él la tiene bien clara. Para darle una buena urbanización y un buen movimiento vehicular que no lo tiene”. Confesó que hablar del secretario de Economía y Administración, Daniel Binando, era “difícil: sacarle plata es terrible y se enoja”. El jefe comunal se quejó de que hay “una cosa muy importante que nadie dice y muchos guitarrean y hablan y proponen, y dicen que el 0,75% gastamos en deporte y es mentira: estamos más cerca del 4%”. Hizo hincapié en que el de Tandil es “un municipio equilibrado, con las cuentas al día, con un presupuesto que armamos en noviembre de 2018 y que este año algo pasó a nivel inflacionario, dólar y devaluación, y tenemos los sueldos al día, cinco hospitales, catorce centros de salud y cinco salas que no les falta nada”.
La “nueva camada joven” (integrada, entre otros, por Andrés Mestralet, Pablo Civalleri y el propio hijo de Lunghi) también recibió su agradecimiento. Lunghi aclaró: “Decir que no tengo problemas con el género, muchachos, pero tengo una sola mujer en el gabinete y vale por cinco, que es Alejandra (Marcieri)”. Agradeció a Pomy Levy como parte de la campaña y del slogan del ‘sobran los motivos’; y a Elías El Hage, “un turco difícil, reaccionario, que me ayuda en muchos discursos y en el esqueleto, y que estoy aprendiendo literatura con él. Le agradezco todo lo que hace por mí desde el Círculo Médico en 1994 y que todavía seguimos juntos”. Lunghi les dio las gracias “a los amigos del PRO, que se han comportado correctísimamente bien y trabajaron sin ningún problema”; y a “una persona que me ayuda todos los días y que lo insulto todos los días, nunca me cumple los horarios pero trabaja mucho”, refiriéndose así a su chofer Roberto Pérez, denunciado penalmente por amenazas por la artista plástica Inés Szigety, y a quien el auditorio de Mitre 550 aplaudió a rabiar.
Casi al final, el candidato que logró el 54, 87%, según el recuento provisional de 308 de las 322 mesas habilitadas, le agradeció a empresarios “que me han ayudado muchísimo, no a Lunghi sino al pueblo de Tandil”, entre ellos a Marcelo Alonso, “que si no fuera por él, la Clínica Chacabuco hubiera cerrado, porque durante seis meses me dio los remedios”; y a la Cooperativa Vial, “que me ha dado incubadoras de terapia, con Brivio, una persona fuerte, noble, que quiere a Tandil”. Asimismo, pidió aclarar “un detalle” respecto a Atilio Magnasco, “que hizo en comodato gratis, sin tocar absolutamente nada, el Parque Solar: dio la hectárea que necesitaba, porque nos vendían una hectárea cerca de ahí por 80 mil dólares y la Usina la consiguió por cero pesos, a 20 años en comodato. Algunos, en vez de preguntar e ir a ver los papeles, revisar y hablar, dicen cosas por la radio con esto”, rezongó.
Por último, Lunghi agradeció “de corazón” el acompañamiento y el triunfo, e hizo un juramento a las y los presentes, a llevar hasta el último día de su mandato: “Voy a trabajar de la misma manera que el 11 de diciembre de 2003, con muchas ganas, con mucha fuerza, con muchos proyectos. Tengan la seguridad que va a haber un equipo de trabajo que no se la cree, que es humilde y serio… como el nuestro”. A propósito de creatividades y prioridades, cerró con que trabajarán “para que Tandil sea la ciudad intermedia más importante de Argentina”.
Con una bufanda blanca y botellita de champán en mano, Lunghi aclaró que es “un ser humano y tengo 209 huesos”, para disculparse por el olvido de nombrar a Gastón Morando y al Consejo Escolar. Un eufórico Frolik apareció en escena, tomó el control del micrófono y brindó con su botella de champan por la Juventud Radical, “siempre adelante”, y les agradeció a todos los fiscales. A propósito de la bufanda que convirtió a Lunghi en un émulo de Cacho Rubio, declaró: “Le regalo a Miguel Lunghi la cábala para que gane él. Ya no se va a presentar más así que…”
Subieron varios integrantes de la Lista 135, a pedido de Frolik y quien le dictaba. Propios candidatos, las y los más jóvenes, sobre el escenario y a centímetros del intendente, cantaron “Otra vez será, Rogelio”, mientras Franja Morada seguía con el minuto de silencio “para el Roge que está muerto”. Nuevamente, ni de boca ni de los gestos de Lunghi se desprendió ni un cuarto de actitud como la que sí tuvo Iparraguirre. El “acto de democracia madura, seria y respetuosa” que mencionó minutos antes, no se condijo con su práctica.
Luego, siguieron “de joda”, como el propio presidente del Concejo Deliberante adelantó que así sería la noche. Con sus boinas blancas, las y los radicales hicieron la degustación tradicional de empanadas, de las que llegaron docenas y docenas al Comité, mientras Miguel Lunghi, el ‘intendente vitalicio’ como lo han llamado, daba su último discurso de victoria.
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