Modelos desarmados en La Confraternidad

Fue en el marco de las actividades previstas para la conmemoración del Día Internacional de la no violencia contra las mujeres. Desde la Dirección de Políticas de Género y Diversidad Sexual del Municipio de Tandil se dio cierre a la edición de este 2017 de ‘Modelos para desarmar’, un programa que promueve el trabajo sobre la equidad de género y la prevención de violencias contra las mujeres y las sexualidades disidentes.

(Tandil) Durante esta edición, participaron la carrera de Diseño Gráfico del IPAT, en el marco de la cátedra de Diseño Institucional; la Escuela Secundaria Nº 8, en la materia Comunicación Institucional Comunitaria; el Colegio Nuestra Tierra, en materias como Literatura, Salud y Adolescencia, Construcción de Ciudadanía y Biología; el Instituto Superior de Formación Docente y Técnico, en el profesorado de Educación Primaria, la cátedra Configuraciones Culturales del Sujeto Educativo de Primaria; el Jardín Nº 903; la Escuela de Educación Media Nº 2; la Escuela Secundaria Nº 12 Estación Azucena; y la Escuela Nacional Ernesto Sábato.

“Modelos para desarmar” propicia la reflexión y la problematización acerca de las propias prácticas y representaciones culturales sobre los roles de género, la violencia machista y la disidencia sexual. La dinámica reside en encuentros con los grupos de alumnas/os, en los que se brindan herramientas conceptuales y marcos normativos vigentes. “A partir del intercambio de experiencias, y con el acompañamiento docente, se estimula la elaboración de producciones, para multiplicar en la comunidad educativa y otros ámbitos de incidencia”, afirman desde la Dirección.

Y en La Confraternidad se vieron los laburos

El viernes 24, en horas de la mañana, los cursos que participaron de la propuesta acercaron y expusieron sus producciones en el Teatro de la Confraternidad Ferroviaria, en 4 de abril al 1300. Entre los intercambios de sentires y reflexiones, las docentes destacaron no sólo el marco conceptual aportado desde la Dirección, sino lo rico del aporte y el debate de los chicos; y el hecho de que es una responsabilidad de las instituciones educativas la aplicación de la Educación Sexual Integral, “no para cambiar opiniones, sino para problematizar y saber de su importancia que esto implica”.

Otra de las docentes relacionó la temática con dar continuidad, ya desde el preescolar, “a toda esta propuesta de diversidad de género y de diversidad en general”, como la interculturalidad, la aceptación del Otro y las características de cada uno. “Con algunos chicos, pudimos ver la obra completa, y les generó muchas reflexiones, sobre sus deseos, sus elecciones, y pudieron transmitírselas a otros compañeros”. En cuanto a la experiencia desde lo pedagógico, “que los chicos puedan seguir pensando, reflexionando, quiénes son, qué quieren y qué pueden hacer por los demás es uno de los objetivos principales y más satisfactorios”, indicó.

En la ocasión, Andrea Rossetti, directora de la cartera local de Políticas de Género y Diversidad Sexual, subrayó que, en cuanto a normativas relacionadas con este tipo de derechos que no estaban, “cada vez que hay una norma, hay un trabajo de la ciudadanía para apropiarnos de esa norma, sino terminan siendo palabras huecas, sin poder darles contenido en lo cotidiano”. Este año, si bien se trabajó con estereotipos, uno de los temas de base de esta propuesta, se agregó la diversidad sexual, ante el hecho de encontrar, en muchos de los establecimientos educativos, graves problemáticas vinculadas a hechos de violencia a partir de intolerancia ante esta diversidad. “Vamos a profundizar este trabajo porque muchas situaciones de violencia ocurren en las escuelas, en noviazgos o vínculos heterosexuales; y otras que tienen que ver con decidir otro rumbo, lo que genera miedos, prejuicios, resistencias, de la propia familia, de las amistades”.

Alan y Fernando, desde la Dirección de Políticas de Género, fueron dos aliados en la propuesta trabajada este año. Compartieron cómo fue su experiencia en ‘Modelos para desarmar’, en la que significó “un desafío” entender a la escuela “no sólo como espacio para impartir reglas y conocimiento, sino también para desarrollar y reflexionar sobre la vida que a uno le guste vivir”. Agradecieron la predisposición que tuvieron los cursos participantes y el hecho de que las y los estudiantes no se quedaron con dudas, “se prendieron y preguntaron”.

Canciones, gráfica, juegos. En la diversidad de producciones, desde la Escuela Secundaria Nº 8, se presentó un trabajo sonoro, con una poesía en la voz de su propia autora, Florencia Barrena. Por su parte, uno de los cursos del Colegio Nuestra Tierra realizó una obra de teatro en audiovisual. Una de sus participantes, Azul, compartió el proceso de trabajo, pletórico de charlas y la generación de debates “sobre violencia y sobre muchas problemáticas sociales. Me llamó la atención todo lo que tenemos naturalizado, como lo normal… Con lo que pasó con el femicidio de Ailín, que no fue una muerte común, fui a la marcha. Muchas cosas movilizan a la sociedad, que se organiza ante los femicidios, pero son el extremo, el punto culmine de una serie de microviolencias que como sociedad aceptamos y dejamos pasar. Cuando se llega al extremo, los femicidios, nos parece algo terrible, y lo es, pero se pueden frenar de antemano y están buenos estos encuentros para concientizar”.

Por último, Rossetti, continuando el comentario iniciado por Azul, se refirió a lo gráfico de pensar en esas violencias como un iceberg, donde la punta, el extremo, es el femicidio. Les habló a las y los jóvenes sobre un video, realizado por una socióloga española, en el que se marcan los escalones por los que crece el círculo de violencia. “El primer peldaño, en estas edades, cuando empiezan a salir con alguien, se puede encontrar cuando el otro cuestiona la ropa que vas a ponerte para salir. Pequeñas cosas que minimizamos, que tenemos naturalizadas, y condicionan nuestra conducta. Ahí hay mucho para desarmar, como cuando se piensa en los celos como sinónimo de amor, o el amor como posesión, que se transmite en las películas románticas.”

Rossetti recalcó en que se trata de “todo un trabajo, porque es difícil correrse de los mandatos aprendidos. Es una tarea que no termina ni en estos espacios, ni en la labor que hacen con las y los docentes, sino que es un trabajo continuo. Revisarnos permanentemente es la invitación”. Asimismo, exhortó a “seguir trabajando esos modelos para desarmar, para llegar antes de que la violencia sea un hecho consumado”, y que, al divisar las alertas y signos, pedir ayuda, “para que otras y otros nos den una mano, y no quedarnos en soledad, con el temor y la angustia”.

“La apuesta de ‘Modelos para desarmar’ es prevenir las violencias”

Miradas del Centro dialogó con Andrea Rossetti, quien se encuentra a cargo de la Dirección de Políticas de Género y Diversidad Sexual del Municipio de Tandil. “Como equipo, nos inspira poder compartir las producciones de los establecimientos educativos que forman parte de ‘Modelos para desarmar’ y que han trabajado durante todo el año. Año a año, adolescentes y jóvenes nos sorprenden con lo que hacen. Este año, se dio un clima que permitió intercambiar pareceres y sensaciones acerca de los procesos y qué nos pasó en ellos, y salieron reflexiones muy interesantes”. Otra de las particularidades del 2017 es que hubo más demanda de las escuelas, de establecimientos educativos, y de carreras: “empieza a proyectarse un 2018 de mayor inserción, en carreras, de esta perspectiva de derechos y de género”.

Rossetti lamentó que, “en muchas oportunidades, llegamos ya cuando la violencia se ejerció”. Por esta razón, “la apuesta de ‘Modelos para desarmar’ es justamente para prevenir episodios de distintos tipos de violencias. Prevenir tiene que ver con desarmar, con desaprender, con desarticular culturas, mandatos, para transformar esta cultura que tiene determinados signos de violencia, palpables, que se observan en lo cotidiano”.

Desde la Dirección de Políticas de Género y Diversidad Sexual manifiestan que la de ‘Modelos para desarmar’ es una de las tareas “que más satisfacción nos da, porque es como sembrar las semillas para que prendan, se multiplican y nos inspiran con sus producciones creativas, muy sentidas, maduras. Se habló de respetarnos en nuestras libertades y decisiones, de ser diferentes sin que haya una mirada que nos juzgue, se habló de prejuicios”. Haber realizado la muestra en el marco del 25 de noviembre, para Rossetti, “es, de alguna manera, recuperar la valentía de las hermanas Mirabal, que querían cambiar un régimen autoritario. Es recuperar ese sentido, y aportar para tratar de cambiar este sistema”.

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Acerca de ‘Modelos para desarmar’

Desde la Dirección de Políticas de Género y Diversidad Sexual del Municipio de Tandil se aborda la Educación Sexual Integral, conforme a algunos de los objetivos de la Ley 26.150, como: “procurar igualdad de trato y oportunidades para mujeres y varones”, promoviendo espacios de enseñanza y aprendizaje; que promuevan saberes y habilidades para la toma de decisiones conscientes y críticas en relación con el cuidado del propio cuerpo, las relaciones interpersonales, el ejercicio de la sexualidad y de los derechos de adolescentes y jóvenes; favoreciendo la inclusión de esta perspectiva en el proyecto educativo de la escuela, en articulación con centros comunitarios, organizaciones sociales, familias.

Entre los objetivos específicos de ‘Modelos para desarmar’ figuran: reconocer e identificar, junto a las/os adolescentes, las representaciones y prácticas que tienen los roles femeninos y masculinos, en nuestra cultura en general y en las relaciones de pareja en particular; reflexionar y sensibilizar acerca de la problemática de la violencia; desnaturalizar prácticas estereotipadas; desnaturalizar que la única orientación sexual posible es la heterosexual; diferenciar la genitalidad (sexo biológico) de las vivencias internas (identidad de género autopercibida); fortalecer el rol de docentes y alumnas/os como agentes multiplicadores y promotores de derechos; y elaborar conjuntamente materiales de comunicación con mensajes tendientes a informar, sensibilizar y prevenir acerca de la problemática.