Orfel Fariña presentó su tercera novela «La escalera inconclusa»

Formado profesionalmente como Ingeniero Civil, Orfel Fariña es un olavarriense que ha incursionado en el periodismo y la literatura para encontrar en la divulgación técnica un espacio laboral que le permite fundir esas vocaciones de escritura. En esta ocasión ha elegido contar una historia de nuestra aldea que puede ser universal. «La escalera inconclusa» es su tercera novela, y en ella relata y describe el derrotero de varias familias olavarrienses a las que acompaña en sus caminos de ascenso y descenso a lo largo de una época trágica para nuestro país.

La cita fue en la casa Cabado el viernes 26 de noviembre al caer la noche. Varias decenas de olavarrienses se congregaron en una vivienda que, aunque quienes no la habían leído no lo sabían,  oficiaba de metáfora de la novela que en un clima de distensión y amistad se presentaría un rato más tarde.

 

Llegada la hora, se apagaron las luces para dejar una tenue iluminación en la que la lectura de algunos fragmentos por Silvana, y posteriormente el dialogo entre Claudio y Orfel dio la bienvenida a los asistentes para luego ir exponiendo la simbología de la escalera del titulo, tanto como objeto real proveniente de la ingeniería y del mundo real, como inspiradora de una historia que también fue real. Posteriormente aludieron la idea de inconclusión contenida en el título, que sugiere ideas, proyectos, sueños o vidas sin completar, truncas. Y en ese sentido la Escalera como símbolo de movilidad social, hasta llegar al ejemplo de la misma Casa Cabado albergaba a todos en ese instante.

 

La pregunta acerca de si una escalera… ¿Sirve para subir o para bajar? produjo un breve debate. En realidad pueden pasar ambas cosas, como en la novela o quizás la mejor definición es la de ese cruce de dos personas en la escalera, que van en sentidos diferentes, pero se cruzan y, quizás, sus vidas cambian para siempre.

 

Llegado ese tramo, Orfel brindó definiciones de la novela: basada en hechos reales con narraciones ficcionadas, en contexto local e histórico, que narra dos historias de vidas que cambiarán para siempre, con una cuota de pequeño misterio por descubrir.

 

En algún momento el dialogo, que visitó las etapas de la infancia de pueblo en esas décadas de plomo fue interrumpido por la voz de la cantante Mónica Badolgio con una canción (El tuerto y los ciegos) que ilustró el momento y al final cerró la presentación con un minirecital.

 

 

Posteriormente el autor respondió algunas preguntas de los asistentes , para pasar a la firma de ejemplares y un sencillo brindis.

 

 

Compartimos una breve entrevista con Orfel Fariña:

 

En síntesis, un libro que nos narra a los olavarrienses de cierta edad determinada, con una estructura que intercala dos historias que van  in crescendo y que se cruzan brevemente. Una de ellas, describe la vida de una familia de clase media en ascenso como la del autor,  y otra que viene de más atrás en el tiempo, de inmigrantes que se van construyendo como laburantes peronistas y se van articulando en la militancia del Perón en el exilio de la década del sesenta, para definir en suma la militancia local y culminar en un sitio de trágica memoria. Quizás otros puedan calibrar la certeza de lo que afirma o el momento que describe… Pero evidentemente merece un lugar entre los relatos de memoria locales. Ciertamente habla de una Olavarría que quizás muchos conocieron y sufrieron. La misma que si nos descuidamos está pronta a saltar sobre nuestros sueños…

 


Una definición de la obra, como se expresa en su contratapa:

«La escalera inconclusa establece permanentemente desafíos para quien lee. Despliega, por un lado, historias interiores. Familias que se arman asentadas sobre escenas que alcanzan una exquisita minuciosidad descriptiva. Al mismo tiempo, hay una historia externa, un contexto socio-político de la Argentina explosiva del siglo XX.

También se juega el juego de las simbologías. Mientras la escalera sugiere el ascenso de sus protagonistas, la inconclusión presagia sueños que quedan por cumplir.

La narración construye, como en el recorrido por la escalera, una historia familiar que avanza en el tiempo. Mientras tanto, otra historia paralela retrocede buscando sus raíces.

La novela está inspirada en hechos reales. Hilando sutilezas e ironías, avanza con fluidez. En algún punto, las historias de sus protagonistas se tocarán. Quien lee encontrará que su propia vida también tiene puntos en común con esos relatos crudos que se despegan de las páginas.

En ese momento, La escalera inconclusa ha empezado a pertenecerle..»

 

Un final con aplausos