Trabajadores a reconocer en el Lugar (no tan) Soñado

Desde el MTE (el Movimiento de Trabajadores Excluidos) y la CTEP (la Confederación de los Trabajadores de la Economía Popular) gestaron ‘mesas de diálogo’, como modalidad para hacer llegar el informe de su situación a actores relevantes de la escena política de Tandil. Su primera reunión tuvo lugar con representantes de la Iglesia y de la Universidad, y el último miércoles sumaron a ediles y sector empresario. El objetivo: reconocerles la importancia de su labor, reflejado esto en la transformación de sus planes sociales en trabajo genuino.

En una primera instancia, integrantes del MTE-CTEP tuvieron su mesa de diálogo con representantes de la Parroquia del Santísimo Sacramento y del Centro de Investigaciones y Estudios Ambientales (CINEA) de la Unicen. En esa oportunidad, el intercambio giró en torno de la importancia actual del rol de los recuperadores-cartoneros en el reciclaje de residuos en la ciudad, pero también en hacer un análisis de las condiciones en las que lo llevan a cabo; condiciones que deberían ser dignas. Labor que, además, debe ser valorada por autoridades gubernamentales y sociedad civil, por contribuir a la limpieza de la ciudad. Por eso, remarcaron la urgencia de un sistema de gestión de residuos que incorpore a los recicladores.

MTE y Universidad están desarrollando un censo de recuperadores, para obtener precisiones, entre otros ítems, sobre cantidad de familias dedicadas a la recuperación de materiales, las características de los hogares, cantidad de material recuperado, acceso a la salud. Datos base para la elaboración de políticas públicas y soluciones a las problemáticas de este sector.

Foto: gentileza página de Facebook del MTE Tandil.

Según los resultados preliminares del trabajo de investigación del CINEA (Unicen), del total de material recuperado en Tandil, el 80% corresponde a recuperadores urbanos, lo que se traduce en 75 toneladas al mes de papel, cartón y metales. Materiales que son reinsertados en la industria y se evita que su destino sea, en el mejor de los casos, el relleno sanitario.

Marcos Picaroni, párroco de la Paroquia del Santísimo Sacramento, en esa primera oportunidad, se comprometió en acompañar a los recuperadores por mejorar sus condiciones de trabajo, como también para la consecución de un predio para acopio y procesamiento de materiales, lo que aportaría al salto en calidad y cantidad de materiales recuperados.

Foto: gentileza página de Facebook de la CTEP Tandil.

Diálogos por el trabajo, en la Sala “15 de junio”

El último miércoles, 6 de diciembre, en el marco de la protesta nacional de la CTEP contra la reforma laboral y previsional, en esa enorme sala de la planta alta del palacio municipal de Tandil se realizó una nueva jornada de diálogo en torno a la economía popular.

De esta reunión, participaron el párroco Marcos Picaroni; los ediles Facundo Llano (Bloque Justicialista), María Eugenia Poumé (Frente para la Victoria), Rogelio Iparaguirre (Unidad Ciudadana), Nilda Fernández (que asumió este domingo su banca por el Frente Renovador), Corina Alexander (ahora concejal mandato cumplido, del Bloque Peronista) y Araceli De Vanna (ahora concejal mandato cumplido del bloque UCR); María Haydée Condino por parte de la Secretaría de Desarrollo Local del Municipio de Tandil; representantes de la Cámara Empresaria y de Apymet (Omar Farah); y referentes de organizaciones sociales locales como la Corriente Clasista y Combativa (Esteban Lucero), Mujeres Sin Techo (Mirta Piqueras),  el Movimiento Evita (Nicolás Carrillo y Matías Valdez), la Mesa de la Economía Social y Solidaria (Marcos Pearson), La Tribu (Mario Raimondi) el Movimiento Popular Patria Grande (Juan Arrizabalaga). Las diversas vertientes que componen la CTEP también dijeron presente, como la cartonera, la de fábricas recuperadas, de limpieza y mantenimiento de espacios públicos, la sociocomunitaria, las cuadrillas de mejoramiento de vivienda, los cuidacoches, feriantes, trabajadores y trabajadoras textiles.

Foto: gentileza página de Facebook de la CTEP Tandil.

Esta reunión contó con la coordinación de Natacha Milazzo (por MTE-CTEP) y de Nicolás Carrillo (por CTEP-Movimiento Evita). Se recalcó la necesidad de que sean reconocidos los trabajadores y trabajadoras de la economía popular, sector olvidado por la gestión municipal. “La preocupante falta de creación de empleo, sumado a las políticas económicas que realiza el gobierno nacional, castiga duramente a quienes menos tienen, quitándoles derechos básicos garantizados en nuestra Constitución, como el derecho a un trabajo digno”, señalaron.

Quienes participaron dieron su compromiso de impulsar el proyecto de banca XXI presentado en diciembre del 2016, en el que se sostiene, entre otras cuestiones, la adhesión del Concejo Deliberante a la Ley de Emergencia Social, la creación de un Consejo de la Economía Popular, y el destino del 1% del presupuesto municipal para cooperativas y demás actividades de la economía popular. El censo de las y los trabajadores de este sector y la mesa de diálogo continúan abiertos, para que la sociedad tandilera y sus autoridades conozcan la realidad del «cartoneo» en la ciudad, sus problemáticas y sus reclamos.

Recién se reconoce que los cartoneros existen en Tandil y que son trabajadores”

Miradas del Centro dialogó con Natacha ‘Chachi’ Milazzo, una de las coordinadoras de estas mesas de diálogo, espacio planteado desde la CTEP Tandil para la reunión de los distintos actores de la ciudad. “En primer lugar, para dar a conocer un poco más sobre cuál es la realidad, hoy en día, del universo bastante amplio de los trabajadores de la economía popular”.

Milazzo apuntó la respuesta positiva de quienes participaron de esta instancia. «Incluso, plantearon que estaba bueno el espacio, por desconocer cuáles son las particularidades del sector y cuál es la realidad que se está viviendo”. De la mesa de este 6 de diciembre salió, como compromiso concreto, “el apoyo a aprobar la adhesión a la Ley de Emergencia Social que presentamos hace un año en el Concejo Deliberante, vía Banca 21”. La consigna principal es que sea reconocido el trabajo de todos los trabajadores de la Economía Popular, “fortalecer esta idea de que son trabajadores y trabajadoras. Estamos hablando de, por lo menos, cinco mil personas en Tandil”.

Foto: gentileza página de Facebook de la CTEP Tandil.

Por otro lado, la integrante de la CTEP y del Movimiento Patria Grande señaló que debe haber una predisposición “a acompañar todo el proceso que vamos a empezar a  dar, respecto a generar, a partir de lo organizado y de la Ley de Emergencia Social, en base al Salario Social Complementario y a distintos programas que se están manejando por medio de la CTEP”. En ese sentido, indicó que “se debe hacer un fortalecimiento sobre el trabajo en ese plano. Hay varias experiencias de cooperativas y de distintos emprendimientos productivos. La idea es fortalecer esos espacios como también ciertas ramas organizadas en la CTEP, como los cartoneros y cartoneras de la ciudad, que se están organizando en el Movimiento de Trabajadores Excluidos (el MTE). Tienen pisos muy bajos desde donde organizarse. Recién estamos transitando el camino de reconocer que los cartoneros existen en la ciudad de Tandil y que son trabajadores”.

La buscada adhesión a la Ley de Emergencia Social apunta a que, para que haya políticas para el sector, tiene que haber un presupuesto designado para ello, así como debe conformarse un Consejo de Economía Popular y un registro de los trabajadores, para el reconocimiento formal de quiénes son los trabajadores y trabajadoras de la Economía Popular. “Como cierre de año, este 14 vamos a estar movilizando como CTEP, en el horario en que sesiona la nueva conformación del Concejo Deliberante, a las 10”, informó Milazzo.

Foto: gentileza página de Facebook de la CTEP Tandil.

“800$ por mes es una cantidad que no alcanza ni para dos días de comida”

María Eugenia Poumé, concejala del bloque Frente para la Victoria, hizo su racconto de lo que fue esta mesa de diálogo: “Fuimos invitados, por parte de varias organizaciones (como la CTEP, el MTE, el colectivo de los recuperadores-cartoneros), y nos explicaron la situación. Quieren la formalización del trabajo para la gente, que se transformen los planes sociales en trabajo formal”.

En la oportunidad, se dio un pantallazo general de la situación del sector en Tandil, sobre las familias que reciben diversas asistencias, como la Asignación Universal por Hijo, el Salario Social Complementario, la tarjeta alimentaria del Municipio. “Es una gran cantidad de gente que está bajo una situación muy precaria y quienes reciben la tarjeta de alimentos del Municipio, realmente, 800 pesos por mes… Es una cantidad que no les alcanza ni para dos días de comida”.

Concejal María Eugenia Poumé (bloque Frente para la Victoria)

Otro de los planteos fue por la urgencia del tratamiento de la adhesión a la Ley Nacional de Emergencia Social, un proyecto que se presentó a fines del 2016, como Banca 21. “Si bien la mayoría de los bloques dijimos que sí, fue trasladada al Departamento Ejecutivo, como corresponde, para que den su parecer. Nunca volvió ese proyecto. Está todavía en el Ejecutivo”.

Por último, Poumé señaló: “Nosotros creemos que la informalidad y el trabajo precario van a aumentar, dado que con las reformas a las leyes previsional y laboral, lo único que se va a lograr es que cada vez se profundice más la pauperización de los trabajadores”.

Un universo de cinco mil familias en el Tandil de hoy

Nicolás Carrillo, otro de los organizadores de estas mesas y referente del Movimiento Evita, indicó a Miradas del Centro que se pone de relieve la compleja situación que atraviesa el trabajo en la sociedad actual: “por el capitalismo, hay grandes porcentajes de población ‘sobrante’, que no entran en el binomio tradicional de empleador y asalariado de la sociedad industrial. Muchos compañeros y compañeras no tienen ningún empleador o patrón que les compre su fuerza de trabajo”.

Esta situación, de larga data en nuestro país, “agudiza la pobreza, la marginalidad, la drogadicción, la violencia intrafamiliar… Es un tema que hay que abordar desde el hecho de que esos miles de trabajadores en Tandil no tienen el derecho al trabajo, los derechos laborales consagrados en la Constitución, como el aguinaldo, obra social, aportes jubilatorios, vacaciones pagas, entre otros”, explicó Carrillo, y agregó: “Por otro lado, hoy son asistidos por políticas sociales que, en su cronicidad, no han hecho más que perpetuar la pobreza”.

Nicolás Carrillo haciendo una exposición de la situación. Foto: gentileza página de Facebook de la CTEP Tandil.

En el caso de Tandil, en lo que respecta a la Economía Popular, se habla del panorama de alrededor de “cinco mil familias que están cobrando la Asignación Universal por Hijo y de tres mil familias que reciben una tarjeta alimentaria”. Con la Ley de Emergencia  Social, se está llegando “a mil familias que cobran el Salario Social Complementario. Un número muy grande de gente como para no abordarlo con una política pública municipal que hoy no existe”.

Según Carrillo, el objetivo de esta lucha está en transformar esos planes otorgados en trabajo. En ese sentido, para que comience a haber una política de Estado, se le solicitó al Ejecutivo que las cooperativas y las unidades productivas de la economía popular puedan trabajar en la obra pública (demostrado con la limpieza del arroyo Langueyú); y que exista un programa de compra estatal de la economía popular (demostrado con la cooperativa textil, que le vende dos mil bolsas por mes al Municipio, y con la reparación de mobiliario escolar).

A partir de la ley, hay muchos emprendimientos, muchas unidades productivas en los barrios, de estas mil familias, en carpintería, herrería, vivero… Muchas cosas que se están trabajando, y no tenemos ayuda del Estado municipal para consolidar esos procesos productivos”, evidenció Carrillo. “Le pedimos al Municipio que empiece a aportar en el marco de esta ley. No alcanza con un plan. Hay que subir el piso de la discusión e ir hacia el trabajo”, concluyó.