Y por la emergencia medioambiental, ¿a quién hay que pedirle?

Como dice el cántico popular, “ya se acerca Nochebuena, ya se acerca Navidad”, y en la Asamblea Ciudadana por la Preservación de las Sierras de Tandil ya no saben a dónde depositar el pedido por el efectivo cumplimiento de la Ley de Paisaje Protegido, por la verdadera igualdad ante la ley entre ciudadanos y empresarios, y por un Tandil que logre llegar a su primer bicentenario ‘sano y salvo’.

Noticias para el boletín medioambiental tandilero nunca faltan, y las que surgen distan de ser buenas. Mientras desde la Asamblea por las Sierras se trabaja arduamente con las escuelas de la ciudad en pos de la concientización, desde el palacio de Belgrano al 400 continúa el reparto de excepciones, las talas indiscriminadas y, la más reciente de las informaciones, movimientos de tierra para instalar canchas públicas de fútbol-tenis… en una ladera del Cerro Independencia, en plena Plaza de las Banderas!

La inundación de mayo de 2017 pareció abrir un momento de reflexión sobre estas consecuencias propias del nivel de construcción sobre las sierras. Sin embargo, fue sólo eso: un momento, y breve. Ante tamaña sumatoria de decisiones poco felices del poder comunal, la Asamblea Ciudadana por la Preservación de las Sierras preparó un listado de problemáticas ambientales que aún no encuentran solución, en búsqueda de que las y los concejales y funcionarios se hagan responsables de sus actos, de cara al Tandil del Bicentenario y del mediano plazo…

¿A QUIÉN LE TENEMOS QUE PEDIR?

El Plan de Manejo de la Zona Protegida Natural ‘Sierras de Tandil’, que debería estar hace largos años, ¿dónde está? Las construcciones siguen avanzando sobre las Sierras, el negocio inmobiliario lucrando y el ambiente degradándose… ¿Paisaje protegido?

¿Esto es falta de política? No. Es una política de la arbitrariedad. Y si aún, con tanta laxitud, hubiera algún impedimento legal, lo resuelven con excepciones y convenios urbanísticos.

¿Cuándo se acaban las explosiones y la sobrecarga de camiones?

Además, el depósito de agrotóxicos se sigue realizando a pocos metros de escuelas en la ciudad, y su uso en casi todo el campo tiene alto impacto en la salud humana, en los productos y en los ecosistemas.

¿Quién dijo que no se puede separar en origen los residuos?

Se deja destruir la industria tandilense y se favorecen los negocios inmobiliarios en terrenos  afectados por residuos contaminantes y sin saneamiento. Se acrecientan los pasivos ambientales, sin generar propuestas de compensación a la comunidad por el patrimonio natural y cultural perdido. Se impulsan cambios de zonas especiales de interés ambiental y urbanístico, en beneficio de privados.

Pululan edificios que sobrepasan la capacidad de los servicios sanitarios. Avanza la impermeabilización de numerosas áreas, impactando en el escurrimiento de las aguas y las inundaciones.

Por todo esto, y hartos de no tener respuestas, nos preguntamos: ¿a quién tenemos que reclamar?

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