¿Cuándo una publicidad es sexista?

Te acercamos un video que resalta la existencia de discriminación, a partir de la presencia del machismo, en la publicidad y en la construcción del estereotipo femenino vigente. De esta manera, se puede abordar el análisis y la visibilización de rasgos misóginos.

Por Daiana Martinefsky.

BASTA DE PUBLICIDAD SEXISTA // Proyecto Squatters

Proyecto Squatters / Contra-publicidad / 2008-2016Discursos violentos conducen a prácticas violentas.#Bastadepublicidadsexista Video re-versionado por Proyecto Squatters 2016Mirá el original: We are #WomanNotObjectsLink: https://www.youtube.com/watch?v=5J31AT7viqoConocé más sobre Proyecto Squatters y la contra-publicidad:Facebook El Squatt: https://www.facebook.com/proyectosquatters/?ref=ts&fref=tsTwitter: @ElSquattBlog: http://proyectosquatters.blogspot.com.ar/

Posted by El Squatt on lunes, 24 de octubre de 2016

La publicidad y los medios de comunicación poseen el rol social de apelar, mediante mensajes, a que las personas actúen de determinada forma, tanto en la vida pública como en el ámbito privado. Aquellos anuncios que mantienen posiciones enunciativas “tradicionales” forman parte de un mediático trabajo social que engloba un problema mayor: la reivindicación del antiguo ideal patriarca que relega a la mujer a los quehaceres del hogar.

Estas interpretaciones las desarrollan   las empresas publicitarias, dirigidas a un rol que las mujeres debieran re-producir según comandan los mensajes que recepcionados y que establecen un ser-mujer  exclusivamente heterosexual, subordinadas a los hombres, las labores domésticas y el cuidado. No se las considera en posición igualitaria para con el hombre, ni mucho menos se hace alusión a los sectores gays, trans, lesbianas, homosexuales y otrxs.

Esto contribuye a la naturalización del ideal de ‘mujer sumisa’ en el imaginario colectivo. En la actualidad, la publicidad no sólo ofrece una imagen irreal de la mujer, sino que la presenta estereotipada en forma negativa. Recurso desarrollado por la publicidad, que se escuda en su finalidad comercial, para la que requiere elaborar representaciones de la realidad para comercializar bienes. Aún cuando dichas publicidades son ofensivas para el público.

Transformar estos contenidos no es tarea fácil, pero tampoco imposible, siempre y cuando se establezcan normas que incluyan el tratamiento y erradicación de la discriminación sexista en la publicidad. Esto se logra mediante la construcción de una presencia social de las mujeres no hegemónica, representando la diversidad de funciones, roles y papeles que cumplen dentro de la sociedad.

Este video es sólo un pequeño recorte de lo que consumimos cotidianamente desde los grandes centros de producción publicitara; espacios en los que generalmente se representa a la mujer como ama de casa, amante, madre y esposa únicamente. Se deja a un lado la realidad que nos atraviesa hace más de medio siglo: la mujer en el mundo laboral, el deporte, la ciencia y en la política. Que el aspecto físico y la estética sean un condimento menor dentro la publicidad y que se incorpore con mayor frecuencia la presencia de representantes del colectivo LGTTBIQ es el horizonte para construir una sociedad con principios de igualdad.