Azul resiste por FANAZUL: esta vez, en caravana

Este domingo 14, en horas de la mañana, una caravana de más de 200 autos unió el centro de Azul con la sede de la fábrica de explosivos Fanazul, en la ruta provincial 80, para manifestarse contra el cierre de la empresa estatal, que dejó más de 230 trabajadores en la calle. En el ingreso a la planta, se realizó un acto de apoyo a los fabriqueros, acompañado con una suelta de palomas y globos azules.

Video: Alejandro Troman (http://www.facebook.com/alejandro.troman)

El acto contó con la participación de los trabajadores despedidos, sus familiares, figuras políticas (como Romina Del Pla y César Valicenti), y vecinos de Azul y la zona, que apoyan la lucha y la resistencia de los fabriqueros. Fueron los oradores el secretario adjunto de ATE Eduardo Bercovich, el trabajador Marcelo Laporte y Juan Cacace. Posteriormente, se realizó una suelta de globos azules (color que caracteriza a Fabricaciones Militares) y de palomas, para reforzar el carácter pacífico del encuentro.

Muchas imágenes pueden compartirse de esta emocionante actividad en la que se reafirmó el apoyo de la comunidad azuleña con sus «fabriqueros». Las remeras en defensa de la fábrica, los abrazos del alma, hombres y mujeres llorando por el proyecto de vida que parece truncarse. Rostros curtidos por el trabajo de una vida y jóvenes con peinados nuevos, todos con las remeras azules cantando consignas por la defensa de su fuente laboral. Tristeza y dolor en los ojos, aunque también algunas sonrisas, agradecían el apoyo de los vecinos.

El primer orador del acto realizado en la puerta de Fanazul fue Eduardo Bercovich, quien centró sus palabras en afirmar: «Dentro de poquito, cuando podamos entrar a esta fábrica todos los trabajadores otra vez, le vamos a demostrar a este gobierno que no nos puede torcer la muñeca, que no nos vamos a equivocar cuando pedimos puestos de trabajo”. Continuó: «Nosotros no vamos a correr el eje de la discusión. No vamos a permitir que nos hablen de abrir canteras para que podamos tener una salida laboral. Nosotros tenemos una empresa estatal que está en la provincia de Buenos Aires, y se llama Fanazul«. Para finalizar: «Le pedimos al pueblo que nos siga apoyando, porque son días difíciles, pero se va a revertir con la lucha y estando en la calle”.

Le siguió Marcelo Laporte, que expresó: «Dentro de lo malo que estamos pasando, esta movilización nos ha dado mucha más fuerza para seguir peleando, porque esto es duro y se torna durísimo. Pero viendo el apoyo de toda la gente, de los familiares, se torna posible. Sacando la mezquindad de los políticos y las gremiales, nos dan más fuerza para seguir adelante«. Con respecto a la próxima reunión en jefatura de gabinete, no con Marcos Peña sino con Gustavo Lopetegui, apuntó: “Esperemos a ver si tenemos buenas noticias y seguiremos con la lucha. Le decimos a los compañeros que no aflojen: esto es todos juntos o perdemos la fábrica”, remarcó.

Por su parte, Juan Cacace recordó: “Cuando se planteó esta lucha el 2 de enero, con un cordón policial más grande que el que hoy tenemos en la fábrica, los laburantes teníamos dos opciones que tomar: o nos convertíamos en protagonistas de la historia que hoy estamos escribiendo, de resistencia, de lucha y por sobre todas las cosas de dignidad y orgullo para recuperar una fábrica que está lejos de dar la pérdida que ellos dicen; o el otro camino era haber sido testigos presenciales e irnos a nuestras casas, resignarnos a buscar trabajo en una ciudad que no tiene oportunidades”.

Con respecto al trayecto desde el centro de la ciudad hasta la planta que realizaron con la caravana, clara y hondamente emocionado, Cacace subrayó: «Cuando hicimos este camino, pensábamos en los años que tiene la fábrica, en estos 70 años, en los compañeros jubilados, en los que han fallecido en accidentes de trabajo, en los que se han jubilado, en los que están a punto de jubilarse; y pensamos entre nosotros de nosotros mismos y en qué teníamos hasta el jueves 28: teníamos sueños, teníamos decisiones, teníamos ganas de comprar nuestra casa, de crecer como persona en un camino, dentro de un proyecto que nos embarcaba, dentro del Estado nacional en el que lo que hacemos nosotros es industria para la defensa. Un país sin defensa es un país que no está en posibilidad de pararse frente al resto del mundo como corresponde«.

Y continuó: “Un tipo como [el interventor] Luis Riva, que tiene seis meses en Fabricaciones Militares, nos quiere hacer creer que los extraños somos nosotros; un ministro de Defensa como [Oscar] Aguad, que ni siquiera pudo dar las explicaciones del submarino, nos quiere hacer creer que somos extraños; un Marcos Peña [Jefe de Gabinete de la Nación], que hace un par de meses vino a decir que en Fabricaciones Militares no iba a pasar nada, él nos viene a decir que somos nosotros los extraños; un presidente de la Nación, que ni siquiera se acordó de nosotros cuando estuvo en Azul, nos dice que somos extraños. Pero los extraños en esta ciudad y en esta fábrica son todo el arco político que no está a la altura de la circunstancia. Y no nos olvidamos del intendente [Hernán Bertellys] cuando nos desmentía y salía a decir que no iba a pasar nada en la fábrica”.

En el acto desarrollado en la puerta de la Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos Azul se adelantó, además, que los trabajadores llegarán en caravana a la reunión que se llevará a cabo el miércoles 17, con el vicejefe de gabinete. En ella, el intendente Bertellys sería recibido por Gustavo Lopetegui. En ese contexto, los operarios marcharán hacia Capital Federal en una caravana que partirá del acampe (que se realiza en el veredón del palacio municipal azuleño), ya que a la dicha reunión, que los afecta directamente, no han sido invitados.

Esto se enmarcará en una tarea conjunta con un corte de ruta que realizarán los integrantes del CENASA, quienes también enfrentan una situación similar. Los trabajadores entienden que si han logrado forzar esa reunión a través de sus movilizaciones, tienen que tener un lugar en esa mesa como participantes y no como espectadores. Eso se apoya en que para los fabriquero hay palabras «muy devaluadas», como las del Jefe de Gabinete nacional, Marcos Peña, quien en septiembre afirmó que Fanazul no corría peligro.