“Arriba del auto somos todos iguales”

Así lo asegura la joven automovilista Josefina Vigo, en esta entrevista con Miradas del Centro.

(por Ornella Candia)

Con sólo 23 años, Josefina Vigo demuestra, carrera a carrera, que ser mujer no es obstáculo para competir en las pistas. La olavarriense es piloto en el Top Race Series y una de las principales referentes nacionales en este deporte. Con su corta edad, cuenta con una amplia trayectoria en el mundo de las cuatro ruedas.

Sus primeros logros los obtuvo compitiendo en karting a nivel nacional. En el año 2012, pasó a competir a nivel profesional en la categoría GT2000, en la conducción de un sport prototipo monoplaza; autos de gran velocidad que alcanzan los 250 Km/hr.

¿Cómo empezaste a formar parte del ambiente del automovilismo?

Desde chica estaba metida en el automovilismo, porque acompañaba a mi papá. A él siempre le gustó, pero nunca pudo correr, por cuestiones de presupuesto, falta de acompañamiento, sponsor. Su familia no podía apoyarlo.

¿Cuándo te diste cuenta de que te gustaba correr en auto?

Un día tuve la posibilidad de probar un Karting, en un circuito de tierra, acá en Olavarría. Me subí y di unas vueltas. La verdad que me encantó, fue una experiencia increíble. A partir de ahí, le dije a mi papá que quería correr, y ni hablar que él accedió enseguida, sabía lo que yo sentía, porque él lo había sentido en su momento y no lo pudo concretar. Por eso nunca me cerró las puertas y me apoyó desde un principio. De esa manera empecé a correr en Karting, a los 8 años de edad. Lo hice hasta el año 2011.

Además de contar con el apoyo de tu papá, ¿tuviste a alguna persona que te inspiró? 

Sí. En su momento, empecé a correr porque había otra mujer que lo hacía. Ver en la pista a Melisa Sequi influyó mucho para que me animara.

¿Sentís que hay prejuicios en relación a que se lo considera un deporte “de hombres”? 

Sí. Es cierto de que si miras al automovilismo ‘desde afuera’, parece un deporte de hombres. Lo ideal es que se sigan sumando las mujeres. Somos pocas las mujeres que practicamos este deporte y nos encontramos en distintos niveles. Hasta el momento, yo soy la única que ha podido acceder a otro nivel de competencia. Por suerte, acá en Olavarría, hay pequeñas promesas y nenas que están empezando a correr en karting. Estoy segura que van a tener un gran futuro en este mundo. La idea es que, quienes somos más grandes, fomentemos este tipo de deportes y podamos servir como inspiración para las más pequeñas.

¿Crees que el hecho de ser mujer molesta a los hombres del automovilismo? 

El automovilismo es una de los deportes más machistas que pueda haber. Además, el espectador mismo es quien señala de manera despectiva a los pilotos, cuando dicen ‘a este le gana una mujer’. Eso por ahí es lo que al hombre más le molesta. Es cuestión de no dejarse llevar por lo que la gente pueda llegar a decir.

Yo creo que todos los deportes son unisex; que todos y todas podemos hacer cualquier actividad que nos guste y debe ser aceptado por la sociedad. Los hombres deben entender que las mujeres también podemos ganar. Y lo hemos demostrado: yo soy campeona de karting, le gané a 15 varones; también corrí en el Campeonato Argentino de Karting, en el que competía contra 30 chicos y ninguna mujer; me di el gusto de ganar en el 2015 la categoría GT2000 en el autódromo Hermanos Emiliozzi, en nuestra ciudad, en donde obtuve mi primer triunfo a nivel profesional y nacional en el automovilismo argentino. Yo no pretendo que en la pista nos traten diferente, pero lamentablemente, si te animás, hay que bancarse la desigualdad.

¿Y a los hombres qué les aconsejarías?

A los hombres les diría que se acostumbren; que nosotras también tenemos derecho a practicar el deporte que nos gusta y a ganar de manera justa, sin que nos manden a lavar los platos. Por más que seamos mujeres, arriba del auto, somos todos iguales y somos todos pilotos. Tienen que adaptarse.

Además de recibir frases poco agradables por el sólo hecho de ser mujer… ¿Te han puesto trabas en el camino?

Hay una situación que me marcó mucho, y en su momento me hizo bastante mal. Fue en Mar del Plata, en el año 2011. Estaba peleando la última fecha del campeonato. Estaba ganando, pero en la última carrera en la que se definía el resultado, quedé subcampeona. El karting no me andaba muy bien porque venía de correr todo el año. Resulta que el piloto ganador de la final estaba fuera de reglamento, por lo que lo descalificaron. En ese momento, me correspondía el título a mí, pero no lo hicieron de manera inmediata. Pasaba que les resultaba chocante que yo saliera campeona ese año, por una cuestión machista; les molestaba que el ‘ganador’ fuera una ‘ganadora’, que les había ganado en su propia localidad. Me dolió mucho, porque postergaron algo que no tenía que ser postergable, sólo por el hecho de ser mujer.