Edgardo Cardozo, «un cantor con guitarra» en Azul

El recital será este viernes 28 en «La Criba» (Palmiro Bogliano N° 628), a las 22:00 hs. El espectáculo se propone como una intimista conversación musical donde el músico, que se define como: «un cantor con guitarra» presentará las canciones de su disco «6 de copas».

Edgardo Cardozo es uno de esos guitarristas, cantantes y compositores que abren su propio camino al margen de casi todo. De las tendencias, de los géneros, del mercado. Por supuesto, su canción está llena de homenajes: la tradición del cantor con guitarra, los folclores rioplatenses, el lirismo spinetteano, el litoral de Juan L. Ortíz.

Es compositor, guitarrista y cantante. Formó parte del grupo teatral La Pista 4, como actor y director musical durante diez años. Ha realizado actuaciones y giras en Argentina, Brasil, Colombia, Venezuela, Francia, España y Estados Unidos. Desde el año 1984 integró diversas formaciones con artistas como Manolo Juárez, Jorge Cumbo, Ernesto Acher, el grupo Cuatro Vientos, Alejandro Oliva y Laurence Morris, entre otros. En 1999 fundó el BUE Trío, al año siguiente grabó el disco solista «Años Después».

Participó junto a la actriz Cristina Banegas en el espectáculo teatral-musical “La Morocha”, luego grabó con ella el disco La Criollez. Junto a Nelly Prince grabó el CD Tarde. En 2007 presentó «Amigo», disco a dúo con el guitarrista, cantante y compositor Juan Quintero. Desde el 2001 forma parte de Puente Celeste junto a Marcelo Moguilevsky, Santiago Vázquez, Luciano Dyzenchauz y Lucas Nikotian. Ha editado tres discos: «Cancione»s (2009), «Mañana Domingo» (2004) y «Pasando el Mar» (2002), y «Puente Celeste» en vivo en Café Vinilo, DVD+CD grabado en 2011, que hace un repaso por su carrera.

El año pasado tocó en El Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, que se encuentra ubicado en el predio donde funcionó durante la última dictadura cívico-militar uno de los centros clandestinos de detención, tortura y extermino más emblemáticos: la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA). En esa ocasión Cardozo manifestó una gran emoción por tocar una vez más en ese lugar, “donde el espíritu del hombre ha descendido a lo más bajo y no debe volver a pasar”. Sin embargo, debió tocar sin cobrar un cachet, porque en un centro cultural que debería contar con financiamiento estatal, ese año, las condiciones habían cambiado.

El valor de la entrada es de 150$.