Iluminados por el fuego, 36 abriles después
En la noche del 1ero de abril, por el adoquinado de avenida Colón, una columna de ex combatientes, familiares de caídos en combate, vecinos, algunos políticos y la agrupación ‘Torino Tandil’ marcharon con antorchas hacia la plazoleta 2 de abril. Una vigilia emotiva, conmemorando el Día del Veterano y de los caídos en la guerra de Malvinas, en un nuevo aniversario del desembarco en las islas.
La convocatoria era a las 22 del domingo, con punto de concentración en la esquina de avenidas Colón y España. Minutos después de las 22, comenzó la marcha a lo largo de avenida Colón. Con los tilos aromatizando el acto, levantando sus antorchas encendidas y cantando la Marcha de las Malvinas, llegaron a la Plazoleta 2 de abril, en Quintana, atravesando los ‘costillares de ballena’ de la entrada a Villa Italia, pasos más allá de avenida Del Valle.
En esta sexta edición de la vigilia hacia el 2 de abril, los ex combatientes allí presentes se encargaron de dejar las antorchas frente al monumento a los héroes de las Islas Malvinas, con un enérgico “¡Viva la Patria!”. Al iniciarse la medianoche, el minuto de silencio fue acompañado por una interpretación en trompeta por un soldado del Ejército. Seguidamente, Horacio Gómez, capellán de la Sexta Brigada Aérea, bendijo el acto e hizo hincapié en el pedido de Memoria, Justicia y Paz, tanto por los 649 caídos en combate como por los 44 tripulantes del ARA San Juan. Luego, entonaron el Himno y cerraron el acto con las estrofas de la Marcha de las Malvinas.
Miradas del Centro dialogó con Héctor Almada, presidente del Centro de Veteranos de Malvinas de Tandil, quien informó que en Tandil hay alrededor de 80 ex combatientes de ese conflicto bélico, así como 36 son los que integran el Centro de Veteranos de Guerra. Almada manifestó que así como se sienten acompañados desde lo político, “en la población falta mucho todavía. Estamos trabajando para eso y creo que, paso a paso y año tras año, nos están acompañando mucho más”.
Sobre la identificación de los cuerpos de los soldados de Malvinas caídos en combate y sepultados en territorio malvinense, Almada señaló que es un hecho que “está bien” y que así como “algunos familiares quisieron y lucharon por esa identificación, hubo otros que no, que simplemente saben que están en Malvinas”. División que también se expresa entre quienes quieren traer los cuerpos a sus ciudades de origen, y otros que no están de acuerdo, “y están en todo su derecho”.
Por último, Almada agradeció a quienes fueron a acompañar en esta vigilia: “Año tras año se hace y cada vez acompaña más gente, y queremos que nos sigan acompañando. Nosotros fuimos por todos los que están acá”, concluyó.